lunes, 20 de julio de 2009

VALOR


A mis hadas y duendes, con amor



Después de mucho tiempo sin verse, los dos amigos se encontraron en la calle Castillo, junto al puesto de los helados.


-"¿Qué tal, cómo estás?", preguntó uno, un poco por compromiso, otro poco por la vergüenza de no saber por dónde retomar una conversación pasado tanto tiempo.


-"No muy bien", le respondió. "No me pillas en el mejor momento".


-"¿Y eso?"


- "Ando de psicólogos y de baja, tú sabes, las circunstancias. Me quedé en paro, empezaron a ahogarme las deudas, mi mujer terminó cansándose de mí y se marchó y yo me embajoné, no encontré razón para afrontar todo esto con valor, ni termino de saber si merece la pena tanta lucha solo por uno".


- "Vaya, ¿puedo hacerte una pregunta?" Y sin darle tiempo a contestar, se metió la mano en el bolsillo, sacó un billete y se lo mostró.-"¿Qué es esto?"


- "Un billete de cien euros"


- " Seguro que sí", ante la perplejidad de su amigo arrugó el billete, lo hizo una bola y se lo puso en la mano. - "¿Qué es ahora?"


-"Un billete que vale cien euros", contestó el otro, mientras lo abría y estiraba.


-"Espérate entonces", añadió, a la par que le cogía de nuevo el billete, lo volvía a estrujar y lo tiraba al suelo para pisotearlo. "¿Qué es?"


_ " No deja de ser tu billete de cien euros"


Y sin levantarlo el suelo, y ante un amigo cada vez más extrañado, el otro, lo pisoteó de nuevo y lo escupió, para preguntarle con calma, "¿sigue siendo un billete que vale cien euros?"


- "¡¡Sí, por supuesto, arrugado, pisoteado o escupido sigue valiendo cien euros!!"


_ "Pues, si un billete no pierde su valor por las supuestas circunstancias que lo rodean, ¿por qué habrías de perderlo tú? Aunque parezca, y solo lo parece, que la vida te pisotea , te oprime o te escupe, aunque pareciera que alguien pretende hacerlo, tú valor es único e intransferible, es tu esencia, forma parte de ti y no se pierde. Vales lo que eres, eres lo que vales. No debes olvidar que solo puedes ser una inversión a la alza y que nada de lo que te rodea podrá cambiar jamás eso, que todo el que te ama estará a tu lado para recordártelo. No se te piden grandes heroicidades, únicamente que recuerdes lo que vales".
Durante unos segundos esperó en silencio, luego... no, no se marhó, prefirió invitarle a una cerveza.


5 comentarios:

  1. Conocía este texto. Y sin embargo, cada vez que lo leo me sigue gustando. De hecho es la filosofía de vida que trato de seguir. Aunque a veces sea luchar contra corriente, aunque a veces desearías tirar la toalla y renunciar, siempre aparece un amigo con un billete de 100, 200 o 500 euros que te hace darte cuenta de que el auténtico valor está dentro de uno mismo.

    Te descubrí por Joseba, y de vez en cuando paso por aquí. Varias son las joyitas que he encontrado, así que seguiré pasando, con tui permiso.

    Un abrazo.

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  2. Holaaa¡¡

    Bonito cuento y no lo conocía, lo adapto para Candela y cia pero con texto y todo que lo mando para allá y si eso te pillas la viñeta, o lo que haga que aun tengo que pensarlo, para que tambien lo pongas en este si quieres....

    Besotes¡¡¡¡

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  3. Es un placer tenmerte por aquí y un honor, te conozco por las aportaciones que haces a Joseba y sinceramente, me gustas.
    Ayer un amigo me comentaba, el día que aprendamos a querernos de verdad, ya habremos logrado SER hasta un punto infinito. Es un lujo tener amigos que nos recuerdan lo que valemos, la cosa es creerlo de nosotros mismos para sonreir y regalar sonrisas. Un beso y que se te cumpla ese deseo que justo ahora se te pasa por la cabeza

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  4. Excelente y aleccionadora historia. Me gustó mucho. Gracias a tí por este blog y gracias a Joseba por invitarnos a conocerlo.

    Mereció bien la pena. Un abrazo, Rita.

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  5. Jose Antonio, cierra los ojos, ala ya está, estampado un beso.

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